El gazpacho es en la actualidad una “sopa fría” mediterránea que tiene multitud de variantes, por citar un ejemplo muy nuestro, extremeño, “gazpacho de cerezas”. No entraremos en descubrir las variedades que existen de esta “sopa fría”, pero ire posteando sobre este tema.
Empezamos por sembrar las “plántulas” del tomate que vienen directamente de los invernaderos. En estos tiempos donde necesitamos producir rápidamente, plantar semillas ya no es una opción para la agricultura moderna. Se suele platar sobre mediados o finales de primavera. Pero todo depende de la meteorología en resumidas cuentas.
Como habéis visto en las fotos este es el proceso de sembrado del tomate en las “Vegas Bajas del Guadiana”
El tiempo de recogida del tomate depende de la variedad que se ha sembrado y que determinará su modo de consumo, ya sea para su comercialización en tiendas y supermecados o en la industria. Puede variar de 40 a 80 días después de su sembrado.
El tomate es sin lugar a dudas un alimento fundamental para una dieta mediterránea y sana. Su color rojo ya nos indica su potencial en antioxidante, el licopeno y sus beneficios para problemas cardiacos. Cuenta con vitaminas B, C y A, más de un 90% de agua, potasio, fósforo, magnesio y calcio entre otros minerales que se encuentran en menor medida. Y con el tomate nos vamos a la famosa “sopa fría” donde a continuación pasamos a los ingredientes, siempre muy variados y según gustos.
Ingredientes;
- Para 2 personas
- 6 tomates
- Un trozo de pimiento verde
- Un trozo de pimiento rojo
- 1 pepino (125g)
- Un diente de ajo
- Pan duro o del día
- 3 cucharadas de aceite virgen extra
- Una cucharada de vinagre de vino o manzana
- sal
- El gazpacho debe triturarse con batidora e ir probando con más/menos agua y pan según lo queramos más fluido o espeso.
También, y según los gustos, podemos añadir o acompañar a modo de guarnición; cebolla, pimiento rojo, pimentón de la vera, huevo cocido, pepino, trozos de tomate y jamón. También es costumbre beber el gazpacho en vaso o comérselo en plato hondo con su cuchara sopera y una estupenda tortilla de patatas extremeña a la vez que española.
Para más información os remito a la Wikipedia sobre el tema que nos ocupa en este post.
Ésto es más salmorejo que gazpacho. Yo al menos, excepto vinagre, así preparo salmorejo y al gazpacho le echo cebolla, pimiento, pepino… no sólo como guarnición, si no integrado en el gazpacho. Serán formas de hacerlo….
¡Hola Guadalupe!
En principio una de las diferencias entre el salmorejo y el gazpacho sería la cantidad de agua y pan, pero sobre todo en el gazpacho se le añaden como tu dices más ingredientes en su elaboración y en guarnición. Gracias por tu comenterio Guadalupe 🙂