“A todo cerdo le llega su San Martín”
“Del cerdo me gusta hasta los andares”
La muerte del cerdo es en Extremadura un acontecimiento popular en nuestras poblaciones, pasando de una forma de supervivencia a la transformación de un evento lúdico, festivo, y como no, turístico. En Extremadura gracias a nuestra dehesa, en los últimos días del engorde del cerdo se les da una alimentación basada en la propia naturaleza, bellotas,hierbas, tubérculos, lo que llamamos montanera, es decir, última fase de engorde del cerdo ibérico que pasta en libertad en los campos desde octubre coincidiendo con el periodo de maduración de la bellota.
De la matanza del cerdo se aprovecha todo y se transformará en embutidos que conservarán la carne para poder consumirla en varios meses. Hoy en día se ha convertido en tradición e incluso en algunas localidades como Alconchel y Llerena se realizán Matanzas Didácticas para mantener y dar a conocer una tradición gastro-cultural.