Celebrado desde tiempo remoto, el origen pagano es muy indudable, para los celtas, por ejemplo, el mes se iniciaba con los cultos a dos de sus dioses: Beltaíne y Belenos. La Iglesia asimilo, cristianizándola, dicha celebraciones mediante la festividad de «La Cruz de Mayo «.
En todas las mitologías antiguas se habla de dioses que habían venido a compartir la asistencia de los hombres en este mundo. La estupefacción empezaba, sin embargo, cuando de presentaba la imagen de Dios pobre, humillado, cubierto de oprobio y muerto en un patíbulo infame. Los milagros de Jesús, su moral, sus parábolas, su Ascensión gloriosa tenía un maravilloso poder de atracción. Una muerte al fin que despenaba el horror y el desprecio por ser crucificado.
No obstante el sentido profundo del misterio encerrado en esa aparente contracción se impone desde el primer día respirando amor y veneración a la Cruz. Aceptar el cristianismo, era aceptar la Cruz. Es el momento en que el mundo se acuerda del madero mismo que fue empurpurado con la sangre del Redentor todas las demás cruces son puros símbolos.
Pero nadie sabe donde esta; la ciudad de David ha sido destruida. Sin embargo, una mujer llena de fe, como una devoción ardiente, con poder y riqueza llega a Jerusalén en busca de la santa Cruz, es Santa Elena.
Por fin, aparece la gruta del santo sepulcro con tres cruces en el fondo, tres cruces en una madera resinosa, oscura, resistente de madera de pino. Solo una de ellas es la verdadera pero cual. Un milagro da la respuesta: una mujer paralítica, sana repentinamente. La multitud cae de rodillas, prorrumpe en gritos de admiración, reza, llora y adora. «La emperatriz se arroja sobre el sagrado tesoro, y no se cansa de tocar y de besar aquella reliquia, que fue el lecho de la misma Verdad.
Esta es la historia y de ahí arranca la celebración del Paso de la Santa Cruz de Palomas. Una celebración que viene representándose, casi de la misma forma, desde fines del s. XIX, y en la que se escenifica la búsqueda, hallazgo y conquista de la Cruz de Cristo por Maria Magdalena (personaje asimilado por una confusión » popular» de Santa Elena. La realización del Paso de la Santa Cruz, 2 de mayo, es el inicio de la consolidación de las fiestas como uno de los elementos turísticos de importancia de la provincia.
Fuente; Diputación de Badajoz